Hay muchas cosas que llegamos a aprender desde pequeños. Yo he podido aprender que cuando las palabras que salen del corazón son las mejores; admito que muchas veces no son las que quisiéramos oír porque a pesar que salgan de éste muchas veces nos hacen sufrir.
Sin embargo, las palabras que quiero plasmar hoy aquí (y sé que pueda resultarme un poco extenso el texto) espero alegren a las personas a quienes les quiero dedicar esto.
Para mis amigos; todos aquellos que he podido conocer en mis 19 años de vida. Unos quienes conozco desde que tengo uso de memoria y que, al crecer y a pesar de ser vecinos, dejamos de hablarnos por un tiempo pero nuestros caminos e intereses, por ser parecidos, lograron unirnos de nuevo y retomar esa vieja amistad.
Las amigas del colegio que también estuvieron desde mi primer año en ese nuevo lugar que me enseñarían a considerar mi segundo hogar; también aquellas que fui conociendo al pasar de año académico. Con quienes, al llegar al último año de estudios, tendríamos un grupo sólido y que, por mas distintos que sean los rumbos en lo profesional y nos embarquemos a conocer nuevas ciudades lejos de nuestro país, nos mantenemos unidas por cualquier medio, hasta que nos volvamos a encontrar nos miremos gritemos de alegría y nos demos un abrazo el cual parecerá no tener final.
.
Cómo no mencionar a amigos que conocí por nuestros hermanos menores. Que por copiar algún cuaderno que mi hermano tenía al día eran motivo de conversación y que al pasar el tiempo fortaleció esa amistad.
Mis amigos con los que estudiaba inglés, quienes fueron los primeros amigos que tuve fuera del colegio porque nunca fui de salir mucho de mi casa siendo pequeña así que amistades de barrio no he tenido hasta crecer. Ciclo a ciclo buscábamos matricularnos en el mismo turno y gracias a ellos pude conocer muchas maneras de pensar y actuar ya que todos veníamos de entornos distintos.
Chicos del coro, también grandes amigos. Aquella etapa marcó realmente mi vida. A decir verdad, conocí mucha gente que no fue sincera y que solo buscaba intereses fuera de los objetivos del coro, pero también conocí a muchos como yo que les apasionaba el simple hecho de aprender y compartir ese amor por la música. Los primeros amigos que me vieron llorar y con quienes compartí uno que otro problema que nunca había contado antes porque siempre he sido de guardar para mí todo lo que me sucede y aparentar estar bien. Gracias a ellos comprendí que no está mal decir cuando estás mal y confiar en quienes también son sinceros contigo.
Muchos de ellos también se encuentran en otros países, pero la alegría de saber que están bien y realizando lo que quieren vence aquella nostalgia de no tenerlos cerca y así el ansiar un próximo reencuentro, un recordar de aquellas canciones que cantábamos y que algunos de nosotros aún seguimos cantando y enseñando a quienes también ingresan al coro con esa curiosidad con la que nosotros empezamos ahí.
Ya entrando a mis últimos años donde comienzo la universidad, nuevos métodos de enseñanza, nuevas maneras de ver lo que está a tu alrededor, nuevas amistades. No todas, solo algunas serán realmente las que seguirán con nosotros.
Hasta el momento he podido conocer a grandes amigos. Algunos con los que conversé desde un inicio en primer ciclo, quienes también creía conocer por primera impresión pero que resultaron ser mejores de lo que pensaba y soy feliz de poder compartir con ellos. Una persona en especial con quien en primer ciclo nunca conversé, pero gracias a su hiperactividad, la profesora llegaba a mandarla a compartir asiento conmigo de vez en cuando, lo cual permitió que conociera a una de las que considero amigas mas cercanas y con quien ahora buscamos superarnos académicamente.
Nuestras ansias de superación han sido tantas que comenzamos a adelantar cursos. Así nos alejamos de nuestro primer grupo, pero como dije, solo aquellos con quienes realmente hay lazos fuertes de amistad perduran a pesar de estos cambios y así ha sido. No importa el horario o que el ciclo sea distinto, siempre buscamos la manera de encontrarnos en la universidad y que aquellos pequeños momentos sean los mejores.
Amigos del otro ciclo, la mayoría mayores que yo, porque a pesar de ser solo un semestre de diferencia aún no encuentro alguien que haya nacido en mi año (no es por decirles viejos chicos, yo soy del 91 y ustedes del 90 jejeje) Al principio no pensé llegar a encontrar amigos tan buenos ya que no los conocía desde primer ciclo como entre ellos, pero me equivoqué. Ahora mi círculo de amistad se ha abierto gracias a ellos y porque hacemos un buen trabajo en equipo me alegra poder compartir con ellos todo lo aprendido.
Las oportunidades laborales las podemos encontrar cuando menos lo pensamos y también buenas personas que me han enseñado que mas que un complejo es un sentimiento!! Arriba Kaisers!! CP Primavera gracias por la oportunidad que me dieron de compartir con ustedes, siempre están en mi mente y en mi corazón amigos. También los chicos de otros complejos con los que pude trabajar. Espero sigan adelante y como hasta el momento lo hemos hecho, seguir en contacto.
Volviendo a la universidad, no solo tengo amigos por mi ciclo, sino también por los talleres a los que puedo pertenecer. Hoy soy una alterno. Sí, soy de Alternotv el mejor videoblog del Perú y lo digo no solo porque ha sido premiado, sino por las ganas que le ponen cada uno de sus miembros. Son geniales chicos, su amistad es muy valiosa para mí.
Y siendo alterno también me ha permitido involucrarme profesionalmente con personas de distintos medios de prensa, y sin querer de una de mis prensas favoritas: la prensa Otaku. Gracias Ikuzo, Extramanía, con ustedes estoy aprendiendo mucho, son grandes personas y me alegro de conocerlos. Sé que en lo laboral es más difícil entablar amistades, normalmente se hablan de compañeros de trabajo, pero me considero afortunada de haber encontrado amigos hasta el momento en este nuevo mundo al que me estoy integrando.
A este mundo también ha de unirse las nuevas redes sociales, y es que es imposible no mencionarlos grupo OTA. En buena hora mi hermana me convenció de utilizar el twitter. Hoy es una herramienta muy útil para mí como comunicadora y también un medio de contacto con aquel grupo al que me he podido integrar. He conocido a chicos muy divertidos con los cuales no solo conversamos de nuestro gusto por el anime, sino que podemos encontrar un tema de conversación con cada cosa que nos pase y decidimos twittear.
No hay duda que en el camino conocemos a muchos que no son realmente amigos, he conocido a varios. Aun así me alegra cruzármelos porque luego viene toda esta lista de grandes personas que hasta el momento se encuentran a mi lado, algunos más cercanos que otros.
Chicos esto es para ustedes, su amistad significa más de lo que se pueden imaginar. Ánimo y muchos éxitos en todo.
PD: Un texto extenso pero valió la pena